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¿Qué es la adherencia terapéutica y cómo podemos mejorarla?

La finalidad de cualquier tratamiento médico es mejorar el estado de salud del paciente, pero este objetivo no es alcanzable si no se cumplen las directrices pautadas por el médico, entre ellas el cumplimiento del tratamiento prescrito. Por esta razón, es necesario que exista una adherencia terapéutica por parte del paciente.

¿En qué consiste la adherencia terapéutica?

La adherencia terapéutica es el conjunto de acciones que se realizan de manera voluntaria por el paciente con la intención de cumplir con el tratamiento que se le ha recetado. Se trata de un compromiso que se desarrolla a partir de la aceptación de las indicaciones del personal médico y sigue con el cumplimiento de las mismas de forma prolongada en el tiempo. De todo ello va a depender, en gran medida, la efectividad del mismo.

El acuerdo y el entendimiento entre el profesional y la persona a la que se dirigen las indicaciones es esencial en el proceso de adherencia. De este modo, establecer una alianza positiva, así como dar las instrucciones necesarias, van a determinar que se cumpla o no con las pautas.

Adicionalmente, a esta adherencia pueden influirle otros factores. Por un lado, los efectos que experimenta el paciente con los distintos pasos del tratamiento, las reacciones adversas que pueda conllevar el tratamiento, así como la mejora o disminución de la sintomatología. Igualmente, el entorno social, el apoyo recibido durante el seguimiento y las creencias acerca de las acciones de los medicamentos pautados.

Cómo mejorar la adhesión a un tratamiento

Algunas sugerencias para lograr mayor adherencia se sustentan en potenciar los anteriores factores de influencia en el proceso de tratamiento.

  1. El médico debe cumplir su misión. Acortar el tratamiento lo máximo posible, además de simplificar y facilitar su explicación. Es decir, facilitar todo lo posible la comprensión de la pauta de administración, así como los beneficios que obtendrá el paciente con el correcto seguimiento del tratamiento favoreciendo así la motivación por el seguimiento del proceso.
  2. Rodearse de un entorno social positivo. Establecer acciones destinadas a brindar soporte social, como puede ser asistencia domiciliaria, gestión de ayudas para los pagos de medicinas, etc.
  3. Recibir apoyo familiar. Contar con el sustento de los seres queridos ayuda a que el paciente se sienta acompañado. Del mismo modo, hay que hacer partícipes del proceso a los familiares para conseguir unos mejores resultados de adherencia.

La importancia de la farmacia en la adherencia

Además de los consejos mencionados anteriormente, no podemos olvidar el papel fundamental que juega la farmacia en el proceso de conseguir la adherencia al tratamiento por parte de los pacientes.

Hay que tener en cuenta que son las farmacias las que dispensan los medicamentos a los pacientes, por lo que deben explicarles a estos la importancia de seguir el tratamiento pautado al pie de la letra. Es por ello, que como farmacéutico tendrás que revisar con el paciente las indicaciones que le ha transmitido el médico, así como la pauta posológica de su tratamiento y un recordatorio de las posibles reacciones adversas que pueden manifestarse y los problemas de salud que pueden derivar del incumplimiento del tratamiento.

Por último, es importante brindarle al paciente un espacio de confianza en el que el farmacéutico pueda resolver todas las dudas acerca del tratamiento o problemas de salud asociados al mismo, ya que pueden pasar meses hasta que se vuelva a tener una visita con el médico.

El cumplimiento de estas condiciones aumentará la probabilidad de que el paciente desarrolle una mayor adherencia terapéutica, lo que finalmente favorecerá una mejoría en su estado de salud.